Las tripulaciones compatriotas regresaron el 7 de diciembre luego de participar en el Ejercicio Combinado Específico "CRUZEX FLIGHT 2018”. El mismo sirvió entre otras cosas, para un mejor desempeño de la función propia de nuestros efectivos, así como para el cumplimiento de los objetivos y metas de la Institución, fortaleciendo los lazos de cooperación existentes entre esta Fuerza y las similares de la región.
El Ejercicio, se basó en la operación de un escenario que requirió el planeamiento y la conducción combinada de operaciones aéreas, basados en un conflicto simulado real de baja intensidad con una estructura de mando y control asentada en la Base Aérea de Natal. Durante el CRUZEX, nuestras aeronaves volaron codo a codo con plataformas de Chile, Perú, Estados Unidos, Canadá, Francia y Brasil.
La Fuerza Aérea sigue siendo el principal componente para la generación, el empleo y el mantenimiento del Poder Aéreo de nuestra Nación en apoyo a la Defensa Nacional. Es así que se realizan varias funciones claves en la consecución de los Objetivos Nacionales. Las funciones fundamentales de la Fuerza Aérea, no son diferentes a la de otros países, por lo que nuestros efectivos cumplieron tareas no solo relacionadas al vuelo, sino como parte del Staff del ejercicio, estando continuamente a la altura de las circunstancias. Una de esas tareas que se cumplieron, fueron las funciones de Comando, dirigiendo todas las demás funciones de manera integrada en todos los niveles.
El 28 de noviembre le correspondió a Uruguay ser el Mission Commander, responsable de planificar y coordinar toda la misión. El Comandante del Escuadrón Aéreo n.° 2 (Caza) comandó una COMAO (Composite Air Operation) de 62 aeronaves, incluyendo los A-37 de nuestro país.
Es así que entre otras, los A-1 y A-29 de Brasil en conjunto con los A-37 de Perú y Uruguay, realizaron la misión de ataque al suelo; mientras que los cazas F-16 de Estados Unidos, los F-5 de Brasil y los Mirage 2000 de Perú realizaron la misión de defensa aérea del paquete. Los adversarios (aeronaves F-5M) intentaron impedir la operación, no pudiendo hacerlo.
El Estado Mayor del Ejercicio, también fue integrado diariamente por efectivos de la FAU, importante tarea esta para el logro de los efectos deseados del Comandante. El desempeño de todos ellos, son el resultado de la doctrina de todos los integrantes de la Institución, proceso por el cual los recursos militares fueron ensamblados, entrenados y desplegados para cumplir con la misión del Ejercicio, que no es tan diferente a la utilizada para defender nuestra soberanía.
Repliegue de las aeronaves.
Si bien no es parte propiamente del Ejercicio, es sin dudas parte de la misión. El 3 de diciembre las aeronaves de combate, en conjunto con la logística y tropas a cargo de los aviones de transporte realizaron la primer pierna. Una vez arribados a Salvador Bahía desde Natal y debido a las condiciones meteorológicas adversas se debió pernoctar. La jornada siguiente, las condiciones en la zona se encontraban un poco mejor, pero la ruta de vuelo continuaba con condiciones adversas, por lo que luego de un briefing de evaluación de riesgos, se decidió pernoctar nuevamente. El día 5 de diciembre, se despegó y se dirigieron a Porto Seguro, debiendo pernoctar una vez más por meteorología, esta vez en el siguiente destino que sería Río de Janeiro. La pierna del día 6 de diciembre, se realizó sin problemas, hasta Río de Janeiro y luego Curitiba, pernoctando. Finalmente el 7 de diciembre las aeronaves compatriotas y los 30 efectivos de la FAU, arribaron a la Base Aérea “Tte. 2° Mario W. Parallada”, con la satisfacción de haber cumplido una vez más con la misión encomendada.
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